Los medios de comunicación de Lepe recibimos un trato degradante por parte del empleado del Ayamonte CF Rafael Domínguez, secretario técnico y encargado de facilitar el trabajo a la prensa, antes del partido ante el San Roque del pasado fin de semana.
Domínguez, a pesar de que la radio de Lepe, Radiolé, se había acreditado, se negó a facilitar la cabina del estadio, única cabina, aludiendo que "yo soy el único que la usa hace seis meses". Todo ello a voces y con malos modos desde la puerta de acceso al terreno de juego.
Ante esta situación, los redactores de Radiolé se tuvieron que sentar entre el público a hacer su trabajo.
Además, en principio sólo permitió entrar a un cámara de la televisión local de Lepe, Lepevisión, y pretendía impedir la entrada al redactor de deportes, Manolo Camacho, que finalmente pudo acceder al campo por la intermediación del presidente del Ayamonte.
Tampoco facilitó las alineaciones a los periodistas desplazados, se limitó a pegar un folio manuscrito con las mismas en la puerta de acceso a la zona mixta del campo, a donde no permitió acceder a la prensa, ni antes del partido ni al final, por lo que las entrevistas se tuvieron que realizar al aire libre fuera del estadio.
Los empleados y directivos del club lamentaron la situación y pidieron que se disculpara la actitud del citado empleado, sobre todo para no manchar la imagen de un club histórico como el Ayamonte.
Los medios de Lepe destacamos que nos hábíamos acreditado como hacemos habitualmente. En todos los campos se les recibe amablemente y se les da acceso a las cabinas de transmisión, si disponen de ellas, y si no es así se les facilita el trabajo, pero nunca con los malos modos y a voces que este señor empleó el sábado.
Ya el pasado verano, con motivo de un partido amistoso en Ayamonte, Rafael Domínguez se dirigió con malos modos a uno de los redactores afectados, que había publicado una información sobre los problemas económicos que sufriría el Ayamonte por la deuda que tenía con el club Martinsa Fadesa. "Habría que meterlos en la cárcel", dijo a gritos en medio del estadio a los responsables de la información.
El mismo empleado, en la web del Ayamonte y en un blog que colabora, calificó de "estúpidos" comentarios vertidos en medios de Lepe sobre la posibilidad de haber jugado el partido a otra distinta a la que se disputó, lo que pudo calentar los ánimos del público, aunque en todo momento el comportamiento de las aficiones fue exquisito.
Los medios de comunicación de Lepe lamentamos profundamente la actitud de este señor, y dejamos claro que en todo momento seguimos el protocolo para trabajar que realizamos en todos los campos. Además, entendemos que se trata de un hecho aislado que en modo alguno mancha la imagen de un club señor como es el Ayamonte, orgullo de todos lo aficionados al fútbol en Huelva desde 1930.
No obstante, reclamamos que actitudes como esta no se vuelvan a repetir, por el bien de todos los aficionados en general y de la imagen de los equipos de fútbol.
Domínguez, a pesar de que la radio de Lepe, Radiolé, se había acreditado, se negó a facilitar la cabina del estadio, única cabina, aludiendo que "yo soy el único que la usa hace seis meses". Todo ello a voces y con malos modos desde la puerta de acceso al terreno de juego.
Ante esta situación, los redactores de Radiolé se tuvieron que sentar entre el público a hacer su trabajo.
Además, en principio sólo permitió entrar a un cámara de la televisión local de Lepe, Lepevisión, y pretendía impedir la entrada al redactor de deportes, Manolo Camacho, que finalmente pudo acceder al campo por la intermediación del presidente del Ayamonte.
Tampoco facilitó las alineaciones a los periodistas desplazados, se limitó a pegar un folio manuscrito con las mismas en la puerta de acceso a la zona mixta del campo, a donde no permitió acceder a la prensa, ni antes del partido ni al final, por lo que las entrevistas se tuvieron que realizar al aire libre fuera del estadio.
Los empleados y directivos del club lamentaron la situación y pidieron que se disculpara la actitud del citado empleado, sobre todo para no manchar la imagen de un club histórico como el Ayamonte.
Los medios de Lepe destacamos que nos hábíamos acreditado como hacemos habitualmente. En todos los campos se les recibe amablemente y se les da acceso a las cabinas de transmisión, si disponen de ellas, y si no es así se les facilita el trabajo, pero nunca con los malos modos y a voces que este señor empleó el sábado.
Ya el pasado verano, con motivo de un partido amistoso en Ayamonte, Rafael Domínguez se dirigió con malos modos a uno de los redactores afectados, que había publicado una información sobre los problemas económicos que sufriría el Ayamonte por la deuda que tenía con el club Martinsa Fadesa. "Habría que meterlos en la cárcel", dijo a gritos en medio del estadio a los responsables de la información.
El mismo empleado, en la web del Ayamonte y en un blog que colabora, calificó de "estúpidos" comentarios vertidos en medios de Lepe sobre la posibilidad de haber jugado el partido a otra distinta a la que se disputó, lo que pudo calentar los ánimos del público, aunque en todo momento el comportamiento de las aficiones fue exquisito.
Los medios de comunicación de Lepe lamentamos profundamente la actitud de este señor, y dejamos claro que en todo momento seguimos el protocolo para trabajar que realizamos en todos los campos. Además, entendemos que se trata de un hecho aislado que en modo alguno mancha la imagen de un club señor como es el Ayamonte, orgullo de todos lo aficionados al fútbol en Huelva desde 1930.
No obstante, reclamamos que actitudes como esta no se vuelvan a repetir, por el bien de todos los aficionados en general y de la imagen de los equipos de fútbol.
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