FICHA TÉCNICA:
1.- MAIRENA: Marcos; Moreno, Víctor González (Juanito), Víctor Gago, Morales; Uriel, Pana, Uri, Reyes; Antonio Cruz y Cisco (Gonzalo).
1.- VILLANUEVA: Alberto; Martín, Moyano, Osuna, Wellington; Rafa Fernández, Juanfer (Miguel Delgado, m. 46), Yoyo (Ryam Harper, m. 65), Quero; David Carmona (Ismael, m. 55) y Picón.
ÁRBITRO: Prada Rodríguez (de Cádiz). Amonestó a los locales Uriel, el delegado, Uri; así como a los visitantes Wellington, Picón y al delegado.
GOLES: 1-0, m. 31: Xisco, de penalti. 1-1, m. 83: Miguel Delgado.
INCIDENCIAS: Encuentro correspondiente a la décimo séptima jornada en el grupo décimo de Tercera División, disputado en el San Bartolomé de Mairena del Alcor, ante unos 400 espectadores.
El Villanueva quería cerrar el año de la mejor forma posible, con un triunfo a domicilio ante el Mairena. Una victoria que le hubiese levado a los cinco primeros puestos de la clasificación. Aunque los jarotes se conformaron con un meritorio puntos en un partido que estuvo dominado por el Mairena en la primera mitad y que tan sólo fue desnivelado de penalti. Tras el descanso, los rojillos se fueron decididamente a por el empate, pero éste se resistió, hasta que Miguel Delgado puso la igualada en la recta final de una segunda mitad en la que los de Galán se adueñaron del juego, no dando apenas opción a su rival.
Atonio Galán, a diferencia de la pasada semana, no dispuso demasiados cambios en su formación inicial, pese a las dos sensibles bajas con las que contaba -Durán y Obregón- y a las dudas de Alberto y Juanfer, que se recuperaron a tiempo de sus procesos gripales. El mayor beneficiado fue el canterano Yoyo, a quien el técnico premió entregándole la titularidad, merced al gran trabajo realizado ante el Recreativo de Huelva B.
La mañana apareció soleada, aunque el duelo estuvo marcado por el viento y el frío. Los primeros minutos de juego resultaron altamente vibrante. En el minuto dos David Carmona fue obstaculizado por un defensor cuando se disponía a disparar en el interior del área. Penalti y expulsión. Aunque el árbitro no observó nada punible y propició el contraataque de los locales. Alberto Luque salvó en dos ocasiones a los suyos de un gol que la grada ya cantaba, que se mostró muy atento tanto en el lanzamiento como en el rechace.
El conjunto jarote quiso llevar el mando del partido desde los primeros compases del mismo. Así, al cuarto de hora, cuando un jugador rojillo ya encaraba la meta contraria en solitario, Uriel le frenó en falta en la frontal del área y se ganó a la amonestación. Rafa Fernández estrelló el cuero en la barrera y Quero aprovechó el rechace en el interior del área, pero disparó desviado. Pese a todo, el dominio, con el paso de los minutos, fue para los locales, quienes llevaron la batuta.
El dominio local se traduce en el gol
En el ecuador de la primera mitad eran los maireneros los que contaban con un mayor porcentaje de posesión, tan sólo salpicado por algunas acciones protagonizadas por la rapidez de David Carmona y Quero, pero sin suerte en todos los casos. Las decisiones arbitrales, un tanto casero, tampoco contribuían. El partido estaba vivo, pero sin goles, la principal salsa.
El tanto llegó de penalti a la media hora de juego. Una mano de Wellington en el interior del área en un centro desde el carril diestro fue castigada por el árbitro -a instancias de su juez de línea-, quien indicó el punto fatídico ante las protestas de los discípulos de Antonio Galán. Los locales no fallaron, gracias al lanzamiento de Cisco, y se pusieron por delante en el tanteo.
A partir de entonces comenzaba un nuevo choque para los visitantes, aunque éstos no acertaron a rematar las escasas llegadas de las que dispusieron, fundamentalmente, a balón parado en varios saques de esquina. Por su parte, los hispalenses se limitaron a mantener el resultado y a perder todo el tiempo posible. El juego se tornó trabado y muy interrumpido.
El Villanueva se va decididamente a por el empate
Tras el intermedio, los discípulos de Galán hicieron caso de las consignas del técnico, que dio entrada a Miguel Delgado para intentar cambiar el resultado del encuentro. Así, los primeros minutos de la segunda mitad fueron de un auténtico asedio de los rojillos, que dispusieron de dos faltas desde la frontal, ambas botadas sin consecuencias. Así, la posesión fue para los rojillos, que no consiguieron materializar sus acercamientos al área del equipo adiestrado por Eusebio Navarro.
Pese a ello, las internadas del argentino Uri eran un incordio constantes para los visitantes. Al cuarto de hora de la reanudación, Moreno puso en aprietos a la zaga rojilla con su potente lanzamiento, pero Cisco no acertó a rematar. Antes Carmona se había retirado del terreno de juego y había entrado Ismael para dar forma a un esquema un tanto más ofensivo en busca de la igualada. Ryam daba más mordiente atacante, pero los albinegros llevaban mucho peligro con Reyes y Antonio Cruz.
El premio a la insistencia
Al Villanueva le daba igual perder por dos que por tres, pero su insistencia tuvo sus frutos. Miguel Delgado igualó la contienda en el minuto 83. El Mairena había renunciado al balón y los jarotes aprovecharon una jugada a balón parado. Rafa Fernández botó la falta desde un costado, el cuero quedó rechazado en el punto de penalti y de Delgado fusiló a Marcos, quien llegó a rozar el cuero.
La precipitación era ahora para los locales, que buscaron la meta contraria con más ahínco, puesto que en la segunda mitad apenas pisaron las inmediaciones de la meta de Alberto. Su racanería fue castigada con el empate.
1.- MAIRENA: Marcos; Moreno, Víctor González (Juanito), Víctor Gago, Morales; Uriel, Pana, Uri, Reyes; Antonio Cruz y Cisco (Gonzalo).
1.- VILLANUEVA: Alberto; Martín, Moyano, Osuna, Wellington; Rafa Fernández, Juanfer (Miguel Delgado, m. 46), Yoyo (Ryam Harper, m. 65), Quero; David Carmona (Ismael, m. 55) y Picón.
ÁRBITRO: Prada Rodríguez (de Cádiz). Amonestó a los locales Uriel, el delegado, Uri; así como a los visitantes Wellington, Picón y al delegado.
GOLES: 1-0, m. 31: Xisco, de penalti. 1-1, m. 83: Miguel Delgado.
INCIDENCIAS: Encuentro correspondiente a la décimo séptima jornada en el grupo décimo de Tercera División, disputado en el San Bartolomé de Mairena del Alcor, ante unos 400 espectadores.
El Villanueva quería cerrar el año de la mejor forma posible, con un triunfo a domicilio ante el Mairena. Una victoria que le hubiese levado a los cinco primeros puestos de la clasificación. Aunque los jarotes se conformaron con un meritorio puntos en un partido que estuvo dominado por el Mairena en la primera mitad y que tan sólo fue desnivelado de penalti. Tras el descanso, los rojillos se fueron decididamente a por el empate, pero éste se resistió, hasta que Miguel Delgado puso la igualada en la recta final de una segunda mitad en la que los de Galán se adueñaron del juego, no dando apenas opción a su rival.
Atonio Galán, a diferencia de la pasada semana, no dispuso demasiados cambios en su formación inicial, pese a las dos sensibles bajas con las que contaba -Durán y Obregón- y a las dudas de Alberto y Juanfer, que se recuperaron a tiempo de sus procesos gripales. El mayor beneficiado fue el canterano Yoyo, a quien el técnico premió entregándole la titularidad, merced al gran trabajo realizado ante el Recreativo de Huelva B.
La mañana apareció soleada, aunque el duelo estuvo marcado por el viento y el frío. Los primeros minutos de juego resultaron altamente vibrante. En el minuto dos David Carmona fue obstaculizado por un defensor cuando se disponía a disparar en el interior del área. Penalti y expulsión. Aunque el árbitro no observó nada punible y propició el contraataque de los locales. Alberto Luque salvó en dos ocasiones a los suyos de un gol que la grada ya cantaba, que se mostró muy atento tanto en el lanzamiento como en el rechace.
El conjunto jarote quiso llevar el mando del partido desde los primeros compases del mismo. Así, al cuarto de hora, cuando un jugador rojillo ya encaraba la meta contraria en solitario, Uriel le frenó en falta en la frontal del área y se ganó a la amonestación. Rafa Fernández estrelló el cuero en la barrera y Quero aprovechó el rechace en el interior del área, pero disparó desviado. Pese a todo, el dominio, con el paso de los minutos, fue para los locales, quienes llevaron la batuta.
El dominio local se traduce en el gol
En el ecuador de la primera mitad eran los maireneros los que contaban con un mayor porcentaje de posesión, tan sólo salpicado por algunas acciones protagonizadas por la rapidez de David Carmona y Quero, pero sin suerte en todos los casos. Las decisiones arbitrales, un tanto casero, tampoco contribuían. El partido estaba vivo, pero sin goles, la principal salsa.
El tanto llegó de penalti a la media hora de juego. Una mano de Wellington en el interior del área en un centro desde el carril diestro fue castigada por el árbitro -a instancias de su juez de línea-, quien indicó el punto fatídico ante las protestas de los discípulos de Antonio Galán. Los locales no fallaron, gracias al lanzamiento de Cisco, y se pusieron por delante en el tanteo.
A partir de entonces comenzaba un nuevo choque para los visitantes, aunque éstos no acertaron a rematar las escasas llegadas de las que dispusieron, fundamentalmente, a balón parado en varios saques de esquina. Por su parte, los hispalenses se limitaron a mantener el resultado y a perder todo el tiempo posible. El juego se tornó trabado y muy interrumpido.
El Villanueva se va decididamente a por el empate
Tras el intermedio, los discípulos de Galán hicieron caso de las consignas del técnico, que dio entrada a Miguel Delgado para intentar cambiar el resultado del encuentro. Así, los primeros minutos de la segunda mitad fueron de un auténtico asedio de los rojillos, que dispusieron de dos faltas desde la frontal, ambas botadas sin consecuencias. Así, la posesión fue para los rojillos, que no consiguieron materializar sus acercamientos al área del equipo adiestrado por Eusebio Navarro.
Pese a ello, las internadas del argentino Uri eran un incordio constantes para los visitantes. Al cuarto de hora de la reanudación, Moreno puso en aprietos a la zaga rojilla con su potente lanzamiento, pero Cisco no acertó a rematar. Antes Carmona se había retirado del terreno de juego y había entrado Ismael para dar forma a un esquema un tanto más ofensivo en busca de la igualada. Ryam daba más mordiente atacante, pero los albinegros llevaban mucho peligro con Reyes y Antonio Cruz.
El premio a la insistencia
Al Villanueva le daba igual perder por dos que por tres, pero su insistencia tuvo sus frutos. Miguel Delgado igualó la contienda en el minuto 83. El Mairena había renunciado al balón y los jarotes aprovecharon una jugada a balón parado. Rafa Fernández botó la falta desde un costado, el cuero quedó rechazado en el punto de penalti y de Delgado fusiló a Marcos, quien llegó a rozar el cuero.
La precipitación era ahora para los locales, que buscaron la meta contraria con más ahínco, puesto que en la segunda mitad apenas pisaron las inmediaciones de la meta de Alberto. Su racanería fue castigada con el empate.
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