El Pozoblanco firmó su cuarto empate consecutivo de la temporada, tras lograr un nuevo punto ante el Dos Hermanas. Los vallesanos se adelantaron gracias a Isidro en el minuto 13 y dominaron la posesión del cuero durante la mayor parte de los minutos, pero los nazarenos reaccionaron, merced a latigazos de Monsalvete, Currito y Chiqui Carmona. En uno de éstos, Juan Carlos, al aprovechar un rechace, igualó el choque en el tramo final. Con ambos equipos totalmente desfondados, los hispalenses a punto estuvieron de llevarse la victoria, sin merecerlo, pero Carmona no estuvo acertado en el alargue. Así, los de Neva dejan escapar dos nuevos puntos del Municipal y ya van cuatro.
La victoria se está resistiendo para el Pozoblanco en el arranque de la presente campaña. El Dos Hermanas visitaba el Municipal, ante unos vallesanos con la necesidad de obtener el primer triunfo de la temporada -tras tres empates consecutivos- para no descolgarse de la zona alta de la clasificación. Para ello, José Antonio Neva no podía contar con Silva, Rizos, Rafa Márquez, Gervasio ni Luismi, lesionados, mientras que Alberto sí pudo ser de la partida, tras superar sus molestias en el pie, a pesar de tener un hueso de éste fracturado.
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La tarde se presentó desapacible con una cortina de agua que arreciaba sobre el césped del Municipal, lo que provocó la escasa afluencia de público. Además, los locales saltaron al terreno de juego con una importante novedad en su elástica -blanca impoluta-, como es la ausencia de publicidad en la misma.
Con la posesión desde el comienzo y gol de Isidro
El encuentro comenzó tal y como se esperaba. Es decir, con los pozoalbenses dominando la posesión del esférico y con el conjunto nazareno resguardado en su propia parcela defensiva, esperando el paso de los minutos y aguardando una contra en un lance puntual del choque.
Alfonso Gutiérrez tuvo el primer tanto vallesano en sus botas en el minuto 8, después de aprovechar el rechace de un defensor, tras el disparo de Balsera en el interior del área. Pese a ello, Diego despejó el lanzamiento a bocajarro, abortando la ocasión del extremo. Acto seguido el propio jugador gozó de un nuevo acercamiento sin suerte.
El asedio era constante por parte de la parroquia local. En uno de estos acercamientos, cuando se rozaba el cuarto de hora de juego, Isidro adelantó al Pozoblanco, aprovechando una indecisión en la zaga visitante. La defensa se adelantó a excepción de uno de sus efectivos e Isidro, controló el balón -que se quedó pinchado en el punto de penalti- y ante la salida de Diego cruzó el esférico para establecer el 1-0.
Las consignas de Neva antes del encuentro se cumplían a rajatabla, puesto que el técnico pretendía que sus discípulos se adelantasen en el tanteo de forma precipitada para jugar con el resultado a favor.
Córdoba Deporte
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